Tarta para un montañista

 

 

Muy llena de ilusión, la mujer de Jose me pidió que hiciera una tarta para el 40 cumpleaños de su marido. Cruzamos infinidad de correos, hasta que conseguimos diseñar la tarta perfecta para esa ocasión tan especial. A unos días del cumple, encomendó a su hermana a traerme la figura personalizada que le había hecho otra amiga, de esas que están tan de moda. Por cierto, estaba muy bien hecha y no le faltaba detalle. Todo esto porque quería que la tarta y la figura quedaran perfectamente integradas y para eso yo necesitaba tenerla a mano en el momento de decorar la tarta. Además era una fiesta sorpresa y no quería levantar ninguna sospecha.

Al final, según me comento mi clienta, vivieron, en sus propias palabras, "una noche inolvidable" y la fiesta fue una sorpresa hasta el ultimo momento.