Al principio se trataba de hacer protagonista al león, pero terminaron colándose otros animales. Es una tarta de 26 cms el piso más grande, de unas 45 raciones.
Y los detalles:
Espero que os haya gustado tanto como a mí. Aquí os dejo una fábula de esas que leíamos cuando eramos niños, aunque de mayores también a veces hace falta recordarlas.
En la selva vivían el león, el tigre y el cocodrilo. Un día el mono, el representante electo por los animales, convocó a una reunión para pedirles una toma de decisión:
-Todos nosotros sabemos que el león, el tigre y el cocodrilo no tienen ningún depredador, sin embargo, tenemos una gran duda: ¿A cuál de ellos debemos rendir obediencia? ¿Cuál de ellos deberá ser nuestro Rey?
Los animales que allí asistían comentaron entre si:
-Es verdad, esta preocupación tiene mucho sentido. Una selva no puede tener tres reyes. Luchar entre nosotros no queremos ya que somos muy amigos… Necesitamos saber cual será el elegido, pero, ¿Cómo descubrirlo?.
Otra vez los animales se reunieron y después de mucho deliberar, le comunicaron al león, al tigre y al cocodrilo la decisión tomada:
-Encontramos una solución muy simple para el problema, y decidimos que ustedes tres van a escalar la Montaña Difícil. El que llegue primero a la cima será consagrado nuestro Rey.
La Montaña Difícil era la más alta de toda la selva. El desafío fue aceptado y todos los animales se reunieron para asistir a la gran escalada.
El cocodrilo intentó escalar y no pudo llegar. El tigre empezó con todas las ganas, pero, también fue derrotado. El león tampoco lo pudo conseguir y bajó derrotado.
Los animales estaban impacientes y curiosos; si los tres fueron derrotados, ¿Cómo elegirían un rey?
En este momento, un águila, grande en edad y en sabiduría, pidió la palabra:
-¡Yo sé quien debe ser el rey! Todos los animales hicieron silencio y la miraron con gran expectativa.
-¿Cómo?, preguntaron todos.
-Es simple… dijo el águila. Yo estaba volando bien cerca de ellos y cuando volvían derrotados en su escalada por la Montaña Difícil escuché lo que cada uno dijo a la Montaña.
El cocodrilo dijo dijo: – ¡Montaña, me has vencido!
El tigre dijo: – ¡Montaña, me has vencido!
El león dijo: – ¡Montaña, me has vencido, por ahora! Pero ya llegaste a tu tamaño final y yo todavía estoy creciendo.
La diferencia, completó el águila, es que el león tuvo una actitud de vencedor cuando sintió la derrota en aquel momento, pero no desistió y quien piensa así, su persona es más grande que su problema: él es el rey de si mismo, y está preparado para ser rey de los demás.
Los animales aplaudieron entusiasmadamente al león que fue coronado El Rey de los Animales.
"No tiene mucha importancia el tamaño de las dificultades o situaciones que tengas. Tus problemas puede que lleguen al nivel máximo, pero no tú.
Tú todavía estás creciendo y eres más grande que todos tus problemas juntos."
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